Para nadie es secreto que el presidente Mauricio Funes es un hombre de rencores formados por múltiples situaciones. Federico Nietzsche, decía “un resentido en el poder implementará políticas de odios y buscará venganzas”. El último de estos rencores es por el fallo de la Corte Suprema de Justicia, que impide al Órgano Ejecutivo efectuar transferencias interinstitucionales de partidas, obligándolo a negociar con la Asamblea Legislativa cada vez que quiera hacerlo. Según el Presidente, este fallo “limita aún más las posibilidades del Gobierno para hacer frente a los problemas más inmediatos de la población. Las atribuciones del Gobierno que han sido declaradas inconstitucionales y que estuvieron en vigencia desde hace más de una década, son instrumentos con los que cuenta un Presidente para gobernar. Si esas atribuciones se utilizan de manera correcta o incorrecta, honesta o deshonesta, transparente o sigilosa o corrupta es cuestión de quién gobierna” . El presidente Funes dice que la de...
Discutamos sobre la libertad individual y qué la amenaza.